Reconstruyeron el Clima de Patagonia de los últimos 3.000 años

2198

lagocipresesEstudio publicado en Revista Nature Communications, permitió reconstruir las fluctuaciones climáticas de la zona de Lago Cipreses en los últimos 3.000 años, un antecedente fundamental para poner los cambios actuales en una perspectiva de largo plazo.

(CR2, 14 de Julio 2014) La investigación “Southern Annular Mode-like changes in southwestern Patagonia at centennial timescales over the last three millennnia”  fue liderada por Patricio Moreno, investigador del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2, Instituto Milenio de Ecología y Biodiversidad (IEB) y académico de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile. En ella se examinaron los sedimentos del fondo del Lago Cipreses, reconstruyendo los patrones de cambios de la vegetación, variación en los niveles del lago, e información sobre ocurrencia de fuego.

Los investigadores encontraron una tendencia hacia condiciones climáticas más secas y cálidas que el promedio de los últimos tres milenios en la zona durante los últimos 120 años. “Condiciones similares han ocurrido repetidas veces durante los últimos 3.000 años, y en la actualidad estamos presenciando un periodo de similar naturaleza, pero de mayor magnitud. Aparentemente durante el siglo XX hay una superposición de efectos e influencias, vale decir una variabilidad natural superpuesta con cambios inducidos por los seres humanos. Esto último, es lo que lleva a condiciones de mayor magnitud durante el siglo XX que en los eventos previos” relató Patricio Moreno, como uno de los resultados principales del trabajo.

Lago Cipreses está ubicado al sur del Parque Torres del Paine, Región de Magallanes. Reviste de una característica muy particular a nivel continental, ya que es un lugar que es afectado únicamente por los vientos del oeste que son los responsables de las precipitaciones que alimentan la vertiente pacífica de Patagonia y Chile Central. De esta manera, se pudo observar este fenómeno de una manera muy nítida.

Otro de los ejes de este trabajo fue el estudio de SAM (“Modo Anular del Sur” por sus siglas en inglés) y que describe un modo de variación climática del Hemisferio Sur impulsado por variaciones en el diferencial de presiones atmosféricas entre latitudes altas (Antártica) y medias (Patagonia), que afectan los vientos del oeste y a su vez la precipitación hemisférico. En la investigación se buscó entender si la variabilidad tipo SAM había ocurrido a escala de tiempo centenial previo al siglo XX en ese sector de Patagonia.

En torno a las variaciones climáticas en el ecosistema magallánico, los autores descubrieron que estos forzantes climáticos provocaron cambios en la composición y dinámica de los bosques magallánicos, ocurrencia de fuego y fluctuaciones de los niveles lacustres (afectado por la combinación temperatura y precipitación)

Al comienzo de esta investigación, existía sólo una reconstrucción paleoclimática de SAM en la literatura científica (Villalba y colaboradores, 2012 ) realizada con anillos de árboles y cuya extensión abraca los últimos 600 años. “Ambos registros, el realizado con anillos de árboles y con sedimentos del Lago, demuestran una tendencia hacia valores positivos de SAM durante el SigloXX, con lo cual vemos una coherencia entre ambas reconstrucciones y constituye una validación del tramo más reciente de nuestros resultados” afirmó el investigador del (CR)2 e IEB.

Otro aspecto novedoso de este estudio fue la identificación de cambios tipo SAM de similar dirección y cronología con eventos similares en el Hemisferio Norte a escalas de tiempo de siglos durante los últimos 3000 años. Los investigadores encontraron que anomalías climáticas contemporáneas con la Pequeña Edad del Hielo, Anomalía Climática Medieval, Periodo Frío de la Edad Oscura y Período Cálido Medieval, entre otros, afectaron a Patagonia, sugiriendo que variabilidad tipo SAM a escalas de tiempo centenal cambió a la par con un ritmo global durante los últimos 3000 años.

Respecto a las proyecciones y continuidad de este estudio, Moreno comentó que con este paper se están dando a conocer los datos obtenidos para los últimos 3.000 años, pero el estudio apunta a un registro de hasta 15.000 años y en ello se continuará ahora la investigación.

Entre los autores de la publicación, también se encuentran los científicos del (CR)2 Maisa Rojas (U.de Chile); René Garreaud (U.de Chile); Ricardo De Pol (U de Concepción),  Rodrigo Villa (Universidad de Magallanes, IEB) e Isabel Vilanova (MACN, Argentina).