El invierno de 2023 fue el más lluvioso de los últimos 15 años, superando los milímetros de agua caídos en un año normal. Sin embargo, aunque este fenómeno incrementó la cantidad de agua almacenada en el país, la situación de sequía se mantiene, por lo que existe incertidumbre respecto de las proyecciones climáticas para este invierno.
Pablo Sarricolea, académico de la Universidad de Chile e investigador del Centro de Ciencias del Clima y la Resiliencia (CR2), avanza que, “en general, los modelos de pronóstico estacional (Copernicus, IRI Columnia, NOAA) convergen hacia un invierno más seco, es decir, Lluvias entre junio, julio y agosto por debajo de lo normal”.
¿Por qué volvemos a una disminución de las caídas de agua? El académico de Casa de Bello explica que “esto es una respuesta a que se proyecta que La Niña (asociada a menores precipitaciones en gran parte de Chile) tenga una probabilidad cercana al 50 por ciento para los meses de invierno, y aumentando a partir de agosto de 2024. 70 por ciento.” Sin embargo, hay que tener cuidado de que estas predicciones estacionales sigan la evolución proyectada, por lo que es importante monitorearlas ya que podrían cambiar”, afirma el especialista.
Por su parte, Roberto Rondanelli, profesor del Departamento de Geofísica de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas y también investigador del CR2, aclara que una proyección meteorológica con meses de antelación es algo que se puede hacer, pero “con poca confiabilidad”. Realizada esta observación, agrega que, “en general lo que sabemos por las observaciones que tenemos es que cuando hay eventos de El Niño la zona central de Chile es más lluviosa de lo normal, y cuando hay eventos de La Niña la zona central de Chile es más lluviosa de lo normal. En Chile llueve menos de lo normal”.
“¿Qué se dice últimamente? El caso es que El Niño está retrocediendo y La Niña se va a establecer. Esto ha sucedido otras veces antes, el fenómeno de El Niño dura un año en su punto máximo y luego decae. ¿Cuándo va a disminuir? Durante el invierno de nosotros, ¿en qué mes disminuirá? “Es una buena pregunta porque si disminuye hacia el final del invierno, entonces significa que durante el invierno todavía estaremos en El Niño o quizás en una fase neutral y por lo tanto quizás podríamos tener un año normal”.
“Si El Niño disminuyera rápidamente y pasáramos a una fase de La Niña durante el invierno, entonces lo más probable es que no sea un año húmedo y lloverá menos que el año pasado, pero todavía es un poco de especulación. En cualquier caso, la temporada invernal parece menos prometedora que el año pasado en términos de lluvias en la zona central”, afirma Rondanelli.
Respecto a estas proyecciones, el investigador señala que “ojalá no volvamos a tener sequía, ojalá tengamos suerte y este sea un año normal porque ha habido años normales con el fenómeno de La Niña. También ha habido años normales, evidentemente, con una fase neutra de El Niño y, aunque es un año seco, espero que sea lo más alejado posible de este año para que podamos recuperar algunos de los sistemas que todavía están tensionados. por la megasequía que se ha producido. duró o que duró 12 años”. | Leer en NewsEuro.