El Dr. Ariel Muñoz, académico del Instituto de Geografía e investigador del Centro de Acción Climática PUCV, fue el encargado de dar a conocer los objetivos de este proyecto, sus avances y proyecciones hasta la fecha.
Por Tania López
Una nueva edición de la reunión gremial y técnica de la Red Apícola Nacional se llevó a cabo a fines de julio en el Centro Cultural de Talagante en la Región Metropolitana. Un espacio que reunió a diversas organizaciones de apicultores del país que se vinculan con la agricultura familiar campesina indígena.
La actividad, que marcó un regreso a la presencialidad, contó con espacios de diálogo y ponencias del Ministerio de Agricultura, ODEPA, INDAP, SAG, entre otras instituciones públicas y privadas. Fue en ese contexto que se presentó la iniciativa “Impactos y adaptación al cambio climático en la apicultura en Chile”, impulsada por la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.
El Dr. Ariel Muñoz, académico del Instituto de Geografía e investigador del Centro de Acción Climática PUCV, fue el encargado de dar a conocer los objetivos de este proyecto, sus avances y proyecciones hasta la fecha. Sobre la invitación de la Red Nacional Apícola al equipo de Apiacción -equipo a cargo de esta investigación-, Muñoz comentó la relevancia de esta actividad que convoca a muchos apicultores, de gran trayectoria y que promueve el desarrollo sostenible de la actividad.
“Esta invitación es de gran utilidad para el avance de nuestros proyectos, especialmente porque nos permite dar a conocer el proyecto e invitar directamente a grupos de apicultores a participar de las iniciativas que estamos impulsando para evaluar el impacto de la sequía en la apicultura y diseñar sistemas de información para implementar medidas de adaptación y generar sistemas de monitoreo de bajo costo que permitan entre otras cosas predecir la producción de miel y conocer la respuesta de las colmenas a las variaciones en el clima en tiempo real”, indicó el también director de la investigación.
Sobre ello, Misael Cuevas, presidente de la RAN, puso en valor la participación de proyectos académicos en estos encuentros gremiales, algo que han impulsado junto a sus socios. “Como Federación siempre hemos puesto en el debate la importancia de la generación de conocimientos vinculada a la cadena apícola. A un año de habernos constituido como Federación en el 2000, convocamos a una reunión a las universidades donde concurrieron cuatro de las convocadas y, desde ahí, se han abierto e incrementado la búsqueda de recursos, vía proyectos, para investigaciones y estudios relacionados con el rubro”.
De ahí en adelante, desde el gremio señalan la relevancia de abrir los espacios a las instituciones educacionales, para que puedan aportar conocimientos a su labor. “En todos nuestros Congresos abrimos las puertas a Universidades y centros de estudios para que presenten resultados o avances en sus trabajos. En ese sentido, estamos muy satisfechos y agradecidos que hayan aceptado nuestra invitación y presentado los interesantes resultados a los participantes”.
TRABAJO COLABORATIVO
Si hay algo que caracteriza a esta investigación es el equipo interdisciplinario que lo compone y las múltiples instituciones que trabajan activamente en la ejecución de este proyecto, entre ellos: USM Bee Lab de la Universidad Técnica Federico Santa María, el Centro del Clima y la Resiliencia (CR2), la Universidad Austral (UACh) y la Universidad de Tarapacá (UTA); la Dirección Meteorológica de Chile (DMC), y el Instituto Nacional Forestal (INFOR). En tanto, esta labor también cuenta con el apoyo de la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (ODEPA), además de grupos de apicultores, incluyendo a la Red Apícola Nacional (RAN).
Al respecto, el representante de dicho gremio indicó que “siempre estaremos disponibles a colaborar en proyectos que constituyan un aporte al desarrollo de la cadena en sus distintas dimensiones. Sé que muchos de nuestros socios han colaborado con información e instalaciones para el desarrollo de proyectos de investigación y seguiremos en esa ruta”.
En la actividad se resaltó mucho la importancia de que, desde la academia, exista una devolución o retroalimentación real, efectiva, de los resultados de las investigaciones hacia la comunidad de apicultores. “Este es nuestro compromiso. Esperamos contribuir de una manera significativa a la actividad y a las formas de hacer apicultura en Chile, desde los sistemas de información, monitoreo y hasta las políticas públicas”, destacó el Dr. Ariel Muñoz, que además es director del Laboratorio de Dendrocronología y Estudios Ambientales de la PUCV.
Desde Apiacción, equipo humano que está llevando adelante esta investigación, se enfatiza en que el apoyo de la Red Apícola Nacional es fundamental para estos proyectos en desarrollo -financiados por la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo-, pero también para futuras acciones e iniciativas que permitan a la apicultura enfrentar los desafíos del cambio climático.
De tal manera, a quienes pertenezcan a la comunidad apícola, se les invita a ponerse en contacto con esta iniciativa a través del correo electrónico apicultura.clima@gmail.com, además de responder una encuesta en línea disponible aquí. El plazo es hasta el 30 de agosto de este año.
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