¿Impacta el cambio climático en la salud mental de los y las habitantes del Meta? (El Cuarto Mosquetero)

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El aumento de la temperatura debido al cambio climático podría afectar la salud mental de los y las habitantes que residen en las zonas cálidas de nuestro país. El departamento del Meta podría enfrentar posibles afectaciones. En el informe del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM), se menciona que en fuentes como Data Library – Colombia y estaciones, se estima que la temperatura media del aire aumentará entre 0.5° y 2.0°C en gran parte del país durante los meses de noviembre, diciembre, marzo y abril. Para los meses de enero y febrero, la temperatura estará por encima de los 2.5°C con respecto al promedio de 1991-2020, principalmente en las regiones Andina y Orinoquía. Esto se entendería como un aumento de temperatura en los siguientes meses, con mayor notoriedad en la región Orinoquía donde se encuentra el Meta.

El estado del medio ambiente tiene una gran influencia en la salud mental de las personas. Pues existe una relación directa, pero a menudo poco atendida, entre el vivir en un ambiente sano y la salud mental. El psicólogo e investigador adjunto del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2, Rodolfo Sapiains, menciona que «cada vez es más claro que el deterioro del lugar en el cual uno vive, en términos de la naturaleza, está asociado a emocionalidades que pueden llevar a generar problemas de salud mental relacionados con ansiedades, depresiones u otros tipos de cuadros».

Las cifras para nuestro país en cuanto al estado general de salud mental no son muy favorables. Según los anuncios del 9 de octubre, las cifras reportadas indican que «de enero a mayo de 2023, hay 1.517.933 colombianos diagnosticados con enfermedades mentales», según la Dirección de Epidemiología y Demografía del Ministerio de Salud y Protección Social. En cuanto a la situación en el departamento del Meta, los intentos de suicidio han aumentado, destacando que el suicidio no es un trastorno mental, sino un síntoma característico o el resultado de estados de algunas enfermedades mentales, dada las especificaciones en el manual diagnóstico y estadístico de trastornos mentales (DSM-5) por el cual  “el comportamiento suicida puede aparecer en el contexto de varios trastornos mentales, más comúnmente en el trastorno bipolar, el trastorno de depresión mayor, la esquizofrenia, el trastorno esquizo-afectivo, los trastornos de ansiedad y los trastornos de adaptación. Raramente aparece en individuos sin patología perceptible”.

Según el Boletín Epidemiológico VIII del Departamento del Meta, correspondiente a 2023 y emitido por la Gobernación del Meta, se notificaron 482 casos, siendo los municipios con las tasas de incidencia más altas «El Castillo 118.7, Guamal 74.3, Cubarral 69.1, Puerto Concordia 68.4, Acacías 60.6, Barranca de Upía 59.4, Restrepo 57.6 y San Martín 55.3, con una tasa de incidencia total de 44.3 casos por cada 100 habitantes, lo que representa un aumento del 3%”.

Esto presenta la posible afectación en los meses siguientes a la salud mental para los y las habitantes del departamento del Meta, debido al aumento de la temperatura media del aire. Según el ensayo sobre la trascendencia de la psicología ambiental en la salud mental individual y colectiva de la Universidad Continental de Perú, las influencias ambientales se derivan de la teoría del determinismo ambiental, donde «el clima, el suelo y la temperatura ejercen un efecto en la conducta humana y en las sociedades», y además al establecimiento de que “una valoración asigna un significado al ambiente, el cual está estrechamente relacionado con las experiencias emocionales y estas a su vez están influenciadas por las percepciones que tiene el sujeto, las que en conjunto desencadenan respuestas emocionales».

Entendiendo que el cambio climático es un fenómeno global que tiene impactos directos e indirectos en la salud humana. En el caso específico de la Zona Orinoquía donde el IDEAM menciono será una zona donde principalmente se presentará los cambios, el aumento de la temperatura puede tener consecuencias significativas en el bienestar emocional y mental de los y las habitantes.

Las altas temperaturas pueden generar estrés térmico, deshidratación y agotamiento físico, lo cual puede tener un efecto negativo en el estado de ánimo y la capacidad de afrontar situaciones estresantes, informando así de la relación entre el incremento previsto de la temperatura según el IDEAM y la salud mental de los Metenses que se encuentran en la Zona Orinoquía debido a la existente conexión entre el medio ambiente (en este caso, el clima), las emociones y conductas que determinan la salud mental de las personas, que para los siguientes meses a los y las habitantes del Meta podrían estar viéndose afectadas. | Leer en El cuarto mosquetero.