Aunque representa solo el 10% de la superficie del océano, la zona costera alberga el 90% de todas las especies marinas y presenta dinámicas capaces de modular el clima regional y generar efectos globales. Las principales ciudades chilenas están ubicadas en esta área y se ven cada vez más expuestas a los impactos del cambio climático. Para el (CR)2, la investigación en la zona costera aborda la influencia de la variabilidad climática y el forzamiento antropogénico en el océano y el fondo marino costeros en zonas clave de surgencia en Chile, así como en los sistemas socioecológicos contenidos.
El fenómeno de surgencia costera (ascenso de aguas profundas ricas en nutrientes) favorece el desarrollo de la industria pesquera en nuestro país. Evaluar los riesgos e impactos asociados a esta actividad requerirá una mejor observación y modelado por parte de nuestros investigadores, así como el diseño y la implementación de acciones de adaptación y mitigación.
Las floraciones microalgales, la eutrofización, así como la mayor incidencia de tormentas y marejadas plantean nuevos desafíos para la gobernanza en las costas chilenas. La regulación en esta zona es diversa y compleja, lo que genera problemas institucionales que deben abordarse desde la línea de investigación.
Las proyecciones climáticas para Chile indican cambios que los regímenes de vientos regionales que favorecerán la surgencia costera. Además, se espera que la disponibilidad de agua dulce se vea afectada por los cambios en los sistemas de precipitación. Estas tendencias pueden afectar el flujo de calor, los aerosoles y la concentración de gases en la costa chilena, entre otros impactos. Por esta razón, los esfuerzos de la línea de investigación se centrarán en el forzamiento climático actual para comprender los procesos que pueden tener implicaciones climáticas, como las modificaciones en la advección o la circulación estuarina.